Actualidad

A+ A-

Las obras en la calle Parricas descubren nuevos restos arqueológicos

21/05/2018 1688
Entre los proyectos que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Alhama de Murcia a través de las concejalías de Infraestructuras y Servicios Públicos, y de Urbanismo, se está ejecutando el correspondiente a la calle Parricas que tiene como objetivo la renovación de las antiguas redes de saneamiento y abastecimiento así como la  nueva pavimentación de la calle. 

La calle Parricas discurre a lo largo de la ladera sureste del cerro del castillo, cercana al conjunto monumental de los Baños, al propio Castillo y a la Iglesia de San Lázaro Obispo, todos con categoría de Bien de Interés Cultural, por lo que el entorno cuenta con grados de protección arqueológica A y B en el Plan General de Ordenación Urbana, lo que hace necesario y preceptivo la supervisión y excavación de proyectos como éste, que implican movimientos de tierras y remoción del subsuelo, según ordena la Dirección General de Bienes Culturales de la CARM, con el objeto de salvaguardar y documentar el patrimonio histórico de la villa.

LA EXCAVACIÓN ARQUEOLÓGICA
La coordinación entre las concejalías de Infraestructuras y Servicios Públicos y la de Cultura y Patrimonio, con la colaboración de la empresa Urdecón y siguiendo las directrices de la Dirección General de Bienes Culturales, ha permitido la adopción de medidas conjuntas para la realización de las obras de la calle Parricas en compatibilidad con los restos arqueológicos existentes en el subsuelo, lo que ha sido posible mediante la supervisión y control arqueológico de las zanjas abiertas desde el comienzo de las obras el pasado mes de marzo, delimitando así las zonas con presencia de hallazgos, de aquellas que no los tienen, y de esta forma, contar con una valiosa fuente de información de cara a futuras obras en la zona.

Los hallazgos más importantes se han producido en el extremo de la calle próximo al Museo de los Baños, tal y como se preveía a partir de los hallazgos de sendas intervenciones arqueológicas durante los años 2003 y 2008. En la primera de ellas se documentó parte de una casa andalusí cuyas estructuras se prolongaban bajo la calzada de la calle Parricas, mientras que en la segunda se hallaron diversos restos humanos de la misma época que conformaban una rauda o cementerio privado vinculado a dicha casa. Hay que tener en cuenta que el urbanismo actual del lugar comienza a reordenarse  desde finales del siglo XVII y sobre todo a partir del siglo XVIII, dando lugar al actual trazado y alineación de la calle.

Dada la entidad de los hallazgos realizados, el pasado lunes 14 de mayo se inició una excavación arqueológica en el extremo occidental de la calle, que se ha prolongado a lo largo de toda la semana hasta el viernes 18 de mayo, bajo la dirección del arqueólogo  Juan Antonio Ramírez Águila.
La intervención, siempre compleja cuando se trata de arqueología urbana en calles con paso permanente, se ha extendido sobre un área con una longitud total de 30 m y una anchura de 2,50 m, empleando medios mecánicos en los niveles superiores de rellenos recientes, y excavación manual con metodología arqueológica de los niveles más antiguos y profundos.

Así ha sido posible ampliar el conocimiento que teníamos de la casa andalusí descubierta en 2003, conservada parcialmente bajo una replaceta existente en esta calle, que se configura como una gran almunia en torno a un patio central, seguramente porticado. En aquella ocasión, sobre un contexto arqueológico que comenzaba en el periodo del Bronce Final y se prolongaba durante época ibérica y romana, destacó el hallazgo de una casa andalusí cuya datación hemos podido precisar ahora, por lo que sabemos que fue construida entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII, en lo que entonces sería una zona periférica en el entorno de huerta de la Alhama islámica. Se trata de un edificio de gran entidad arquitectónica, de unos 240 m2, propiedad de un alto personaje local de la época, lo que contrasta con la total ausencia de decoración parietal. Este hecho hay que enmarcarlo dentro de un periodo de gran rigor religioso y austeridad en lo estético, característicos del período almohade (1172-1228 d.C.). Esta almunia está en la línea de otras grandes residencias campestres existentes alrededor de la huerta de Murcia o de Lorca, y en las que podemos ver los antecedentes de las grandes fincas de la Granada nazarí que se desarrollarán durante los siglos XIV y XV, descritas por autores de la época, como Ibn al-Jatib.

LA CONSERVACIÓN DE LOS RESTOS ARQUEOLÓGICOS
La realización de estas obras de renovación urbana ha sido compatible con la conservación del patrimonio y la historia de Alhama de Murcia, mediante el esfuerzo conjunto de las administraciones por buscar y hallar las soluciones adecuadas a cada caso, haciendo posible que la historia permanezca in situ para generaciones futuras, ya que los restos quedarán conservados de nuevo en el subsuelo, al tiempo que sobre el nuevo pavimento se marcará el trazado de los muros medievales, dejando constancia de su existencia. 

Previamente, los restos arqueológicos han sido debidamente documentados mediante dibujo planimétrico, levantamiento topográfico y fotografía digital de los mismos, así como de todo el proceso de excavación.

Para su conservación, las estructuras han sido cubiertas mediante malla de fibra de vidrio tupida y sobre ella se ha colocado un geotextil de alta densidad, y a continuación una fina capa de arena cubriendo a las anteriores. Finalmente, se ha terminado de rellenar la zanja con zahorra, sobre la que se colocará el nuevo pavimento. Las conducciones de saneamiento renovadas discurren contiguas a las estructuras descubiertas, por la misma zanja por donde discurrían las anteriores.

Durante los trabajos, en estrecha colaboración con la empresa adjudicataria, se ha procurado en todo momento interferir lo menos posible en el uso de la calle por parte de los vecinos, a los que cabe agradecer su paciencia y comprensión.

Comenta esta noticia en Facebook

Alhama de Murcia en las Redes