El pasado 21 de mayo finalizó la programación escolar en materia de Educación Vial, llevada a cabo por la Policía Local de Alhama de Murcia en las instalaciones del Centro de Educación Vial Ricardo García Redal.
Como se viene realizando desde años atrás, estas jornadas van destinadas a la comunidad educativa en edad escolar, concretamente a alumnas y alumnos pertenecientes a los cursos comprendidos desde infantil (4 años) a 6º de primaria, así como a los cursos 1º, 2º y 3º de la ESO, llevando de este modo una formación continua desarrollada desde años atrás.
La formación comenzó en el mes de septiembre de 2018. Las cifras de alumnas y alumnos que han recibido estas clases son 2.203 alumnos de infantil y 567 de primaria. Este año también ha contado con la visita de los alumnos de 5º de primaria del colegio Sagrado Corazón de Librilla.
La filosofía inspiradora que mueve el presente proyecto es “aprender, adquirir y mejorar comportamientos viales” que minimicen los riesgos en materia de Seguridad Vial de los escolares en su incorporación a la circulación y en el uso de las vías con el claro objetivo de disminuir las elevadas tasas de siniestralidad vial.
Para poder prevenir esta accidentalidad, la Policía Local da a conocer distintas normas de comportamiento, en función de la edad de los alumnos. Se comienza formando a los de menor edad como peatones (4 y 5 años).
Los alumnos de los cursos comprendidos entre 1º de primaria y 6º, además de una formación teórica, realizan prácticas en el circuito habilitado al efecto en el Centro de Educación Vial, utilizando como vehículos bicicletas y karts, simulando una conducción real por las vías del municipio.
En relación a los alumnos de secundaria, la formación consiste en recordar y reforzar los conocimientos adquiridos en fases anteriores, ampliando las materias consolidadas e introduciendo nociones básicas sobre conducción negligente y temeraria, sobre el peligro que supone la utilización manual de los dispositivos de telefonía móvil durante la conducción, así como la influencia del alcohol y/o drogas en la misma.
Para poner en práctica estas materias, los alumnos de 3º de la ESO conducen bicicletas utilizando unas gafas que simulan los efectos del alcohol y drogas en el organismo.
Como en ediciones anteriores, cabe destacar la colaboración en la impartición de ponencias de un joven que sufrió un accidente de tráfico con resultado de secuelas graves.