El Director General de Carreteras de la Región de Murcia, José Antonio Fernández y el concejal de Infraestructuras y Servicios Públicos de Alhama, Antonio García, han visitado esta mañana el punto kilométrico 20 de la RM-515, una vez finalizada su reparación tras los episodios de lluvia y nieve de diciembre y enero, que provocaron la cesión del terreno en dos tramos. La visita ha contado con la presencia del concejal de Urbanismo, Antonio José Caja, del alcalde pedáneo de Gebas, Manuel Gambín y de la concejala Antonia Nieto, además de técnicos y responsables de las obras.

Los desperfectos causados por las lluvias provocaron el desprendimiento de taludes sobre la carretera y la aparición de grietas en la calzada que dificultaban la circulación. Los trabajos han consistido en la retirada del arbolado caído, la construcción de dos muros de escollera con piedra para consolidar la calzada y evitar futuros desprendimientos, con salidas de agua para proteger el talud de las lluvias. Se ha repuesto el firme dañado y revestido la cuneta con hormigón para evitar filtraciones en este tramo de la carretera, así como la construcción de arquetas que recojan el agua de lluvia y la evacuen. Además se ha ganado anchura y se ha eliminado una curva cerrada de la carretera con poca visibilidad y mejorado el trazado de la vía. También se ha llevado a cabo el repintado de las marcas viales y señalización horizontal y la renovación de la barrera de seguridad. 

Esta carretera, que une los municipios de Alhama y Pliego, pasando por las pedanías de Gebas y El Berro, contará en su integridad con un firme en buenas condiciones y la mejora de los puntos complicados donde no hay visibilidad y aquellos que presentan dificultad para el cruce de dos vehículos. Para ello se han puesto en marcha de las mediciones que determinarán el alcance del proyecto. El compromiso de la Comunidad Autónoma, a través de la Dirección General de Carreteras, es la mejora del trazado y conseguir que la carretera tenga visibilidad y anchura suficiente para que no existan puntos conflictivos, incluyendo los puentes.

Los plazos marcados establecen la elaboración del anteproyecto y la previsión de los costes antes del verano. Tras ello se redactará el proyecto definitivo y se contratarán las obras antes de que acabe el año, con el objetivo de completarlas en 2018, aunque en función del coste final podría hacerse en dos tramos hasta 2019.