“Alhama de Murcia lleva años demandado unas nuevas instalaciones que se adecúen a las necesidades de la feria, que dispongan de una superficie mucho más amplia que la actual y que permitan albergar nuevas atracciones, ya que nuestros hijos se están montando en las mismas que nos montábamos nosotros cuando éramos niños. El viejo recinto no reúne las condiciones de seguridad y comodidad para una ciudad de 22.000 habitantes como la nuestra, que dé cabida a jóvenes y a mayores”. Así lo ha indicado hoy la alcaldesa de Alhama, Mariola Guevara, en su visita al inicio de las obras del recinto ferial que se construye en la urbanización Nueva Espuña.

Este nuevo espacio cuenta con más de 16.000 m2 divididos en tres grandes áreas, una dará cabida a las atracciones de adultos e infantiles, otra a los chiringuitos de las cofradías y una tercera destinada las carpas de las peñas de noche. También albergará las casetas de las tómbolas y los puestos de comida que se vienen instalando durante las fiestas. Una de sus principales características es que va a posibilitar contar, junto a las ya existentes, con otras atracciones inéditas en Alhama, como una gran noria.

El nuevo recinto tendrá un bulevar peatonal central de 16 metros de anchura con arbolado, mobiliario urbano y alumbrado de última tecnología led. El resto de viales dispondrán de anchuras de 12 y 10 metros, que enlazan con el vial principal.

La distribución de los espacios se ha definido a través de reuniones con personal municipal y externo con experiencia en el desarrollo de la Feria de Alhama, contando con los sectores implicados en la realización de las fiestas. Guevara ha señalado que “nos hemos reunido en distintas ocasiones con feriantes, peñas, cofradías y otras asociaciones de la feria de noche para consensuar el proyecto, y nos han ido trasladando las carencias actuales y sus necesidades”. La parcela de Nueva Espuña duplica la capacidad del recinto situado en el parque de La Cubana, lo que va a permitir, además de la llegada de nuevas atracciones, que peñas y chiringuitos cuenten también con un espacio mucho más amplio. Estos últimos se distribuirán en forma de U y dispondrán de un gran escenario donde todos los comensales podrán ver de frente las actuaciones que se realicen, a diferencia de la distribución en el viejo recinto, donde solo una parte tenía acceso directo al escenario mientras consumía. Las carpas de las peñas ven aumentado su espacio significativamente, lo que les va a posibilitar acoger a un mayor número de personas. 

Está prevista la construcción de unos aseos de obra, que se complementarán con otros WC portátiles durante la realización de las fiestas.

El aumento de la seguridad es uno de los principales pilares de este proyecto, se trata de un espacio perfectamente comunicado para la entrada y salida de vehículos de emergencia, y ubicado en una zona urbanizada de amplias dimensiones dentro del casco urbano.

“Se puede llegar andando desde cualquier punto del municipio, pero aquellos vecinos y vecinas que vivan más alejados y se desplacen en su coche tendrán zonas de aparcamiento totalmente gratuitas próximas al recinto”, ha indicado la alcaldesa.

Otra de las apuestas del proyecto es la accesibilidad, la eliminación de barreras arquitectónicas y la adaptación de espacios se ha elaborado teniendo en cuenta las necesidades de las personas con movilidad reducida.

El recinto ferial también va a contar con arbolado perimetral y en el paseo peatonal principal, además de mobiliario urbano compuesto por papeleras de acero galvanizado, bancos de tres metros de longitud con respaldo y apoyabrazos y una fuente de agua potable. El pavimento de los espacios estará acorde a su uso: en el bulevar central será de hormigón impreso de color; las calles y las zonas de chiringuitos y carpas lo tendrán de aglomerado asfáltico, y las atracciones y tómbolas de aglomerado drenante. En distintas partes del perímetro se instalará una barandilla galvanizada de protección, y las aceras exteriores tendrán más de tres metros de anchura.

Tras la semana de Feria, los vecinos del municipio podrán utilizar este lugar como un espacio ajardinado para el paseo, el recreo y otras actividades.

Para la realización del tradicional concurso de migas y del castillo de fuegos artificiales está previsto habilitar la parcela municipal en la urbanización de Los Secanos, junto a la calle Molino, de más de 15.000 m2 y a escasos metros del nuevo recinto.

La feria de día, los mercadillos y los grandes conciertos se mantienen en el centro urbano.